Perrerías

El diccionario de la RAE define perrería como muchedumbre de perros. También puede valer jauría. El resto de las acepciones, curiosamente, se fijan en actitudes personales llevadas a la alegoría, no con intención bondadosa, más bien caústica, como iracundia y faena al semejante.

El mejor amigo del hombre no recibe un buen trato en nuestro léxico. Me parece injusto. El perro es compañero noble en la generalidad y amigo leal en la particularidad. Te dan sin pedir trueque. Es su naturaleza altruista, aunque no se pierda de vista que es grafismo del sometimiento que es no morder la mano que da de comer.

El  hombre no ha sido agradecido con la singularidad cariñosa de los perros hacia los amos. Hago esta acotación porque su instinto responde como tal frente al desconocido, es decir, imprevisible. Lo somos las personas con nuestra racionalidad por bandera. No pidamos peras al olmo.

La propiedad del can ha sido piedra de toque de crueles abusos. Vida de perros es  metáfora de la miseria, sublimada cuando al animal le llega la hora de la muerte, solo porque ha dejado de servir para la caza o la guardia de la propiedad; o peor aún, ha dejado de divertir. Figura aterradora para la bonhomía es la de este buen amigo, desvalido, sin dueño, ante la jauría humana.

Creo saber de lo que escribo. He sido dueño efectivo de perro y ahora adoptivo del de mi hija. Incordian, claro. Cortan las alas de la movilidad. Se les va aceptando en locales comerciales y de hostelería, aunque pienso que con una transición de talantes  muy apresurada. Los protagonismos sobrevenidos difícilmente culminan en una actuación sobresaliente. Necesitan macerarse en la costumbre.

Completamente a favor de la sanción pecuniaria y hasta de privación de libertad si hay salvaje sadismo con los perros u otras especies animales. Pero no puedo estar de acuerdo con la tendencia creciente a humanizarlos. No son infrecuentes los casos de propietarios de animales que han recorrido el camino inverso: se han animalizado.  Son animales, pero como los humanos, encierran sus grandezas y sus miserias mimetizados en la peculiaridad del instinto.

Hablar de derechos de los perros u otra mascota, implica obligatoriamente, desde la perspectiva humana, aparejar obligaciones. ¿Cuáles son las de un perro? Todo el amor, todo el respeto, toda la lealtad, todo el cuidado para ellos de nuestra parte. Jamás el abandono. Este es el código de la buena perrería.

ÁNGEL ALONSO

2 comentarios en “Perrerías

  1. Admirado compañero
    Hace unos meses, uno de esos perros que, como repiten bobaliconamente sus propietarios, NUNCA muerden, atacó a mi nieta mayor, causándole graves lesiones en la barriga y en un brazo. Por esta razón no he podido emocionarme con tu artículo sobre los chuchos, sobre todo teniendo en cuenta,además, que hace unos días conocíamos la muerte de dos mujeres que habían sido atacadas por los perros. Se que algunos solo tienen en la vida la comprensión y compañía de los canes, afortunadamente ese no es mi caso y por eso veo a las mascotas de otra manera, con perdón

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