La Comisión de Patrimonio, el Ayuntamiento y la pasarela del Melgar

Por los actuales mandatarios municipales, desde hace más de un año, se vienen difundiendo noticias respecto al propósito de dotar con una nueva pasarela al parque del Melgar, enlazada con la c. Mérida Pérez. Todas ellas relacionadas con el resultado de solicitudes enviadas a la Comisión de Patrimonio de la Junta; obligados, al estar en el área de protección de los BIC cercanos (palacio y catedral). De la consulta de estos expedientes se deduce la peculiaridad y enredo con que se está gestionando este asunto, que va y vuelve (por ahora en sendas comisiones de 26 / 4 / 2024 y 27 / 2 / 2025)  y que, sepamos,  aún  pendiente de contar con un proyecto definitorio, aprobado,  de su instalación y repercusión. 

Causa sorpresa, tanto en una como en otra Comisión, la indefinición con que se abordan  los restos arqueológicos existentes en dicho entorno amurallado (en la subida desde el parque del Melgar a la c. Mérida Pérez), los denominados de la Puerta Romana. Y aún más  que en la primera, la de abril de 2024, entre otras recomendaciones incluya “la retirada de la marquesina existente”, es decir, la que por acuerdo de la propia Comisión de Patrimonio  en su día fue exigida al Ayuntamiento, para la aprobación del proyecto de este parque; proyecto  cuya materialización se ejecutó en los pasados 90  y que hoy disfrutan los ciudadanos. No es  un elemento estructural cualquiera esta marquesina, por su diseño, costo,  y sus dimensiones, algo más de 27 m  de longitud (hasta la cercanía de la avda. de las Murallas), de 5 a 8  m de anchura, para una superficie cubierta  de 182 m². Su instalación, cuando se procedió a la urbanización y ajardinamiento del parque  no fue una decisión caprichosa, sino que se implantó para armonizarlo con el telón frontal del otro extremo,  el del sureste, es decir, con la casa modernista de los Granell (con edificio hoy  a su costado, posterior, afortunado, del arquitecto Javier Pérez).

No hemos visto que oficialmente a la Comisión de Patrimonio se haya solicitado la retirada de la marquesina existente, si bien pueden haber existido desde el Ayuntamiento conversaciones  con algún miembro de la misma para tal fin. El “Diario de Astorga”, el 30, abril, 2024, recoge unas declaraciones de los actuales gobernantes municipales en las que informan que la nueva pasarela “se colocará adosada al lindero oeste de la plaza (del parque), en el lugar   actualmente ocupado por una marquesina discurriendo sobre los restos de la Puerta Romana”. Si  la Comisión de Patrimonio, sin proyecto previo, ha considerado, en principio,  oportuna esta propuesta, es decir, el anterior trazado indicado por los gobernantes municipales, y que, como anticipo, para su ejecución,  se ha embarcado a recomendar el desmonte de la marquesina próxima al largo muro de propiedad particular, más desafortunada no ha podido ser su decisión. El hecho de retirarla,  sin solucionar el tratamiento de ese paredón  del  noroeste (la imagen de una pasarela ascendiendo sobre el mismo, sin más, resultaría penosa), no entonaría con el entorno patrimonial, sino que lo desmerecería. Guarda, por otra parte, sintonía con otros elementos del parque, tales los parasoles con sus asientos, quiosco, fuente, etc.   

Los restos arqueológicos de la Puerta Romana, en el tramo de muralla frontal  a la catedral,  no son un patrimonio cualquiera, aunque a los que somos profanos, como para tantas cosas, pueda parecérnoslo; como  insignificantes podemos percibirlos, en comparación con el resto de la extensa muralla rehecha, tan altamente espectacular y llamativa.  Excavados en los pasados años 70 por el profesor Tomás  Mañanes, con posteriores excavaciones y estudios de Milagros Burón Álvarez, que viene desempeñando un cometido patrimonial en la Junta, y de la arqueóloga municipal, M.ª Ángeles Sevillano, constituyen el testimonio rescatado más antiguo de la muralla astorgana. Delatan la existencia de una puerta de acceso a la ciudad, de 4 m de anchura, protegida y flanqueada por dos torres semicirculares de 8 m de diámetro.  La ejecución de la obra de la calle Mérida Pérez (esa  que los que  ahora son gobierno y antes oposición, tanto usan y en ella se  fotografían, que bien está, pero que  detestaron e intentaron parar antes de las elecciones y que nada para ella han tenido económicamente que conseguir, ni resolver), decíamos que el trabajo arqueológico en la  ejecución de la mejora de esta calle que conduce a los ábsides del palacio y la catedral,  ha deparado rescatar la porción de la torre que flanquea la puerta por la derecha, entrando, y que permanecía oculto bajo la misma.

La colocación de una pasarela, donde indican los gobernantes municipales, supondría sobrevolar los restos de la torre derecha, lo que implicaría que los usuarios transeúntes solo podrían ver el testimonio del cubo que flanquea la puerta por la izquierda y el tramo de la entrada. Y quienes pretendiesen contemplar los restos en su conjunto, ya sea desde la zona superior del parque, o desde la rasante original de la puerta sirviéndose de los escalones existentes, o desde la calle, verían obstaculizada la visión por la propia pasarela. Dicho más  brevemente, carece de sentido y supone un atentado patrimonial el implantar sobre la propia Puerta Romana, ya fuere sobrevolando los cubos o su acceso, dicha pasarela. Máxime cuando hay solución para su colocación en su inmediato entorno, que es el que en su día fue determinado, es decir, el que ocupa la escalerilla hoy existente. Tal emplazamiento no fue elegido al tuntún, sino porque en tal sitio la muralla conservada es prácticamente inexistente hasta sus cimientos.

Cuando gestionamos obtener una subvención excepcional para urbanizar la calle Mérida Pérez (concesión que ha de agradecerse al señor consejero Suárez-Quiñones), planteamos una segunda actuación con una nueva pasarela, diseñada por los arquitectos del Eje, con un diseño monumental y con solución para evitar la congelación en el invierno de su plataforma. Consideran esta propuesta muy costosa los gobernantes actuales, y por lo que se ve también innecesario su carácter monumental; y no parecen decididos a conseguir, como para la calle, una subvención excepcional. A ellos corresponde la decisión. Pero en todo caso, que la nueva pasarela respete, no atente patrimonialmente, en lo que atañe a la propia  Puerta Romana.  

Juan José Alonso Perandones

Un comentario en “La Comisión de Patrimonio, el Ayuntamiento y la pasarela del Melgar

  1. Sois todos iguales. Durante tus mandatos se reformaron calles con materiales de cuarta, y poca durabilidad, a parte de estar mal ejecutadas las obras. Ahora estos hacen una chapuza monumental en la brecha sin reconstruir cubos. Todos os habéis olvidado consolidar la muralla en el postigo, que amenaza derrumbe. Tomar nota de León como está recuperando su muralla. Ahhh y la obra de arte de la calle de la culebra, ejemplo arquitectónico y de materiales, de la piedra empleada en el ayuntamiento más de lo mismo. Sois todos iguales , os superaís en incapacidad . De la estación del oeste joya de la revolucion industrial ya hablaremos y de sus ….

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